Ponemos 150 gramos del chocolate blanco y la nata, en un recipiente que aguante el calor. Puedes derretir el chocolate en el microondas junto con la nata, o al baño maría (mi opción preferida).
Una vez que está bien derretido, añadimos la cucharada de Champin, y mezclamos bien.
Añadimos la cucharada y media de mermelada, pasándola por un colador. Es muy importante colarla para retirar todas las pepitas. Volvemos a mezclar muy bien. Tapamos con papel film, y lo guardamos en el frigorífico mientras preparamos los recipientes de chocolate blanco.
Los 100 gramos de chocolate blanco restantes, los vamos a derretir al baño maría.
Con ayuda de un pincel, o una mini espátula de silicona, vamos a dar una capa de chocolate, a una cápsula de mini cupcakes. Así con todas. Las llevamos al frigorífico, y esperamos de 5 a 10 minutos, se habrá solidificado. Repetimos esta operación un mínimo de tres veces.
Una vez solidificada la última capa, retiraremos con mucho cuidado la cápsula de papel. Rellenamos con la crema de champagne y frambuesas que tenemos enfriando, y adornamos con azúcar para adornar.
Guardamos en el frigorífico hasta la hora de servir.