Hervimos la leche, con la piel de un limón y una naranja. Dejamos que hierva a fuego bajo durante 1 minuto, para que se aromatice. Apagamos y dejamos templar.
En un bol grande, ponemos la harina con el resto de la levadura seca. Hacemos un hueco en el centro y añadimos, los huevos, la sal, el azúcar, y añadimos el agua de azahar. También añadimos la masa madre que tenemos reservada, rompiéndola en varios trozos.
Y añadimos la mitad de la leche que está aromatizada, colándola.
Mezclamos todos los ingredientes, y empezamos a amasar, hasta que sea mas o menos compacto. Notareis, si la masa necesita más leche, (depende mucho de la marca de la harina). Se nota en la sequedad de la masa, y tenemos que ir añadiendo poca cantidad a la vez.
Cuando se compacte la masa, la pasamos a la encimera y amasamos un poco más. Añadimos la mantequilla fría a la masa, en trocitos mejor. Y amasamos y amasamos.
Y vamos a ver como la masa empieza como a romperse, y la mantequilla a salir por todas partes… … es lo que debe pasar … y seguimos amasando…
Es posible que debemos amasar unos diez minutos, hasta que forme la masa lisa y unida. No os preocupéis, toda esa mantequilla, se quedará integrada y la encimera completamente limpia.
Hacemos una bola con la masa, y la ponemos en el bol que hemos utilizado antes (por ejemplo), engrasado previamente con un poquito de aceite. Lo tapamos con un paño, y lo ponemos en un lugar templado (como el horno, como he explicado antes), y fuera de corrientes.
Debemos esperar a que casi triplique su tamaño. Puede tardar de hora y media a tres horas.
Formar los cupcakes:
Una vez que tenemos el primer levado (que ha duplicado o triplicado el volumen), pasamos la masa a la encimera nuevamente. La amasamos un poco, para desgasificarla, la quitamos el volumen.
Dividimos la masa, en porciones de 50 - 55 gramos cada una. Formamos una bola con la masa, y las vamos dejando dentro de las cápsulas de cupcakes.
Tapamos las bandejas de cupcakes con la masa, con papel film que hemos espolvoreado con harina (para que no se pegue la masa cuando suba).
Ponemos las bandejas nuevamente en el interior del horno, y dejamos que dupliquen el tamaño.
Una vez que dupliquen el tamaño, sacamos las bandejas y encendemos el horno a 180ºC .
Ahora toca lo divertido, vamos a decorar los cupcakes de rosco de reyes. Ahora la masa es frágil, y debemos tratarla con mucho cariño
Primero pincelamos la masa con huevo batido por toda la superficie. Mejor si lo hacemos con un pincel de silicona que es mas suave, y lo hacemos sin apretar, no queremos que se baje la masa.
Adornamos con las frutas escarchada, almendras laminadas, azúcar.. con lo que quieras. El azúcar, se prepara poniendo una o dos cucharadas de azúcar y unas gotas de agua, lo mezclas un poco, y el azúcar se compacta. Y ya puedes poner montoncitos por la masa.
Una vez caliente el horno, metemos las bandejas, bajamos la temperatura a 170ºC y horneamos 20 minutos. Si vemos que se nos está dorando mucho, podemos taparlo con papel de aluminio.
Sacamos las bandejas, y pasamos los cupcakes de rosco de reyes a una rejilla para que enfríen completamente.
Montamos la nata. Ponemos en el bol de la batidora, la nata para montar y empezamos a batir a velocidad media.
Añadimos el azúcar cucharada a cucharada y dejamos que monte.
Cuando veamos que está prácticamente montada, añadimos el queso para estabilizarla. Batimos a alta velocidad, hasta que las varillas dejen unos surcos marcados y con tonalidad amarilla.
Rellenamos una manga con una boquilla rizada y reservamos.
Partimos el cupcake por la mitad más o menos, ponemos una buena capa de nata, y volvemos a poner la parte que hemos cortado por encima.
Guárdalos en el frigorífico hasta la hora de comerlos.