Lo primero es poner el horno a precalentar a 220ºC y preparar la bandeja de cupcakes, con spray antiadherente o con cápsulas de papel.
En un bol grande, mezcla la harina, la levadura, bicarbonato, sal, canela y la nuez moscada. Reserva.
En un bol mediano, mezcla el aceite, azúcar blanca, azúcar moreno claro, los huevos. el extracto de vainilla y la leche. Cuando tengas esto bien mezclado, añade el calabacín.
Vierte estos ingredientes, sobre los ingredientes secos. Remueve hasta que todo esté bien integrado.
Añade las pepitas de chocolate y repártelas por la masa de forma suave con ayuda de una cuchara o pala de silicona.
Llena las cápsulas de los cupcakes hasta arriba con la masa.
Hornea 5 minutos a 220ºC y luego reduce la temperatura a 175ºC y hornea 16-17 minutos más. Al introducir un palillo en el centro del muffin, este debe salir limpio, (puede salir manchado de chocolate, pero no de masa).
Una vez que saques la bandeja del horno, déjala sobre la rejilla 5 minutos, y luego saca los muffins y déjalos sobre la rejilla hasta que enfríen completamente.